La senadora del PAN aseguró que las autoridades estadounidenses investigarán el caso de la residencia del hijo de AMLO, José Ramón López Beltrán, después de mostrar la denuncia que realizó ante el Departamento de Justicia
Xóchitl Gálvez, senadora por el Partido Acción Nacional, anunció que la denuncia que realizó para que sea investigado el posible conflicto de interés en relación al caso de José Ramón López y la casa en la que residía en Houston, fue admitida por autoridades de los Estados Unidos con número de caso 16439-711-457-818.
“Quiero anunciarles que la Security Exchange Commission (SEC) ha admitido la denuncia que esta servidora hizo para que sea investigado (el caso). Esta es una real denuncia. Aquí están todos los elementos de la denuncia. Los documentos anexados”, aseguró la legisladora.
Durante su participación en la conferencia de prensa del grupo parlamentario del PAN, Gálvez expuso la hoja de la querella que dijo, además de ser aceptada por las autoridades estadounidenses, también lo fue por la Fiscalía General de la República. Advirtió a Morena de no cantar victoria en la resolución que implica al hijo del mandatario e integrante de ese partido por la Casa Gris.
“También la FGR me admitió (la denuncia). Por lo tanto yo le diría a Morena que no coma ansías, sé que ellos están acostumbrados de manera autoritaria a resolver las cosas, pero quien va a determinar el conflicto de intereses y posibles actos de corrupción es el Departamento de Justicia de Estados Unidos, la SEC”, dijo.
Junto a su partido, Xóchitl Gálvez ha sido una de las principales figuras dentro de la oposición que se ha manifestado y tomado acción en contra de José Ramón y su esposa Carolyn Adams, a quienes se les ha acusado de corrupción al rentar una ostentosa casa en Texas, propiedad de un exejecutivo de Baker Hughes, empresa relacionada contractualmente con Petróleos Mexicanos.
Y es que, el anuncio de la senadora panista se da apenas un día después de que la misma compañía diera a conocer el resultado de la auditoría interna que realizó para esclarecer los hechos. En ella, se determinó que la empresa no tuvo tratos directos con Pemex y que Keith Schilling, el exdirectivo implicado, en ningún momento estuvo involucrado en los negocios para la zona de México y Latinoamérica.
“Les puedo decir que no encontramos ni un conflicto de interés ni nada irregular, (todo está) totalmente de acuerdo con las leyes mexicanas las prácticas de esta empresa. Tenemos más de 60 años operando en México, siempre con total transparencia y estricto cumplimiento de todas las leyes aplicables y de los requerimientos de Pemex”, comentó Bob Perez, vicepresidente de Baker Hughes.
Sobre el proceso a seguir con las autoridades de Estados Unidos, Xóchitl Gálvez mencionó que tanto el Departamento de Justicia como la SEC, le rendirá cuentas a ella como denunciante. De paso, dijo, buscará que el proceso abarque también la situación de Kei Partners, en lo que podría ser otro conflicto de interés de la familia López.
“Le contestarán a esta servidora. Dejé correos electrónicos, dejé teléfonos y también tengo la posibilidad de seguir anexando las pruebas que yo crea convenientes. Posiblemente pronto viaje a Texas para ver algunos otros temas porque la idea es que se haga una investigación mucho más amplia”, compartió.
Después de conocerse la noticia, ninguno de los implicados ha hecho declaración alguna al momento en que se redacta esta nota. Ni José Ramón, ni el presidente y tampoco el Departamento de Justicia estadounidense o la SEC. “Disculpas tienen que pedir ellos por engañar a los mexicanos. Por ir a vivir a una casa de más de 120 mil pesos de renta mensual. Por andar en una camioneta de un millón y medio de pesos”, concluyó la senadora.
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